jueves, junio 26, 2008

Recuerdo

Caminaba ayer, según recuerdo, a la lavandería... esa, la que está más cerca de casa. Que lejos estaba la otra. Bien poco que iba, pero para hacerle justicia, hay que decir que era volviendo de aquella, intentando un nuevo camino, que descubrimos esta. Está bonito Vincennes, o quizás Fontenay debiera decir, a estas alturas ya no sé bien donde empieza uno, ni donde termina el otro. Poco importa, son mis barrios, con eso debiera bastarme.

En fin, caminaba a la lavandería y en uno de esos impulsos que me vienen de repente, miré hacia el cielo... harto azul había, y sin embargo, harta nube también, en especial una... una bien grande, de formas bien definidas, yo creo que era una paloma, una paloma blanca y algodonosa. Bueno, tal vez era otro pájaro, no sé porqué se me hizo la idea de que era una paloma,... quizás es porque cuando chico las dibujaba así... con esa forma bien simétrica, de alas bien abiertas... blanca, muy blanca, un poco menos algodonosa, para ser justos, pero básicamente igual.

Y a que venía lo de la paloma?... ah, ya recuerdo, que cuando volvía de la lavandería, me dio de nuevo por mirar el cielo (bien grande que es, más difícil es no mirarlo). Claro, me acordé de inmediato de la paloma, pero ya ni rastros... quien sabe donde se fue volando. Y entonces, cuando me puse a imaginar que había sido de la algodonosa paloma, se me vinieron a la cabeza los recuerdos... los recuerdos y la eterna pregunta de adonde se van cuando dejan de ser recuerdos. A ese lugar yo ya le había puesto nombre alguna vez, el "baúl de los no-recuerdos". Y bueno, me fue inevitable pensar en otra cosa (y las nubes se me fueron a los ojos), pensar en el lugar que ocupan en la vida del hombre los recuerdos, la importancia... están en la esencia del hombre?... puede el hombre vivir sin recuerdos?... pierde sentido la vida sin recuerdos?.

Que fuerte cuando alguien te dice que no te va a olvidar nunca, que fuerte sentir la necesidad de decirle eso a alguien. Creo que no volveré a decirlo, aunque en su momento sienta la necesidad... y es que ahora ya no me parece relevante... si algún día olvido a alguien, no será porque esa persona no fue importante, relevante, esencial en mi vida. Los recuerdos no desaparecen cuando dejan de ser recuerdos, simplemente se van de viaje a algún lugar bien adentro de nuestro corazón.

Si alguna vez me da por olvidar, espero recordarme de esto... no, no de lo que estoy escribiendo, si no más bien de lo que estoy sintiendo ahora mientras escribo... supongo que entonces sonreiré como ahora... supongo que entonces comprenderé lo que ahora tengo la sensación de estar comprendiendo.