miércoles, julio 30, 2008

Arborescencia atemporal.

Hoy en cierto modo volví a ser aquel de dos años atrás, volví a vivir en aquellas hojas secas que caen atemporalmente en medio del verano parisino, volví a necesitar de las preguntas que nacen en las caminatas evitables.

Hoy en cierto modo volví a ser árbol, mi mirada volvío a perderse entre mis ramas y mis pies volvieron a anclarse fuertemente, por al menos un instante, en este bosque que tantas veces me ha visto nacer.

martes, julio 08, 2008

Ayer

Era el tiempo en que las palabras caían sin forzarlas, era otra época, época en que las cosas simplemente sucedían. Hoy, y cuando habló de hoy quizás me refiera a mañana, las cosas no suceden simplemente, todo me parece forzado, todo tan calculado...

Me gustaba ayer, pues todo me parecía sonoro, desde el número de tu casa, hasta los colores del jardín... sí, todo era tan musical, tan natural, primaveral...

Hoy todo se ha vuelto reflexivo, otoñal, arbóreo. Yo sé, en otros ayeres lo otoñal me era casi primaveral, pero hoy ya no es hoy, sino el ayer de mañana, y mañana no más que una simple proyección del hoy, del hoy que sueña con primavera, que no concibe rama sin hoja, ni hoja sin flor...

lunes, julio 07, 2008

Hoy

Hoy una pausa, que mañana el tiempo me alcanza... de vértigo supe en jornadas pasadas, hoy me detengo a esperarme y recordarme en esos tiempos.

Hoy dejé las dudas invadirme, pues había tiempo para aquello, mañana tendré que enviarlas a buen lugar, pues una vez que el tiempo me encuentre no podré darle ventajas.

Hoy viajé a lugares lejanos, bien adentro de mi corazón... viajé mientras el tiempo se detuvo detrás mio a descansar... fue un breve largo viaje espacio-atemporal por el tiempo en que el tiempo no fue tiempo.

Hoy fue hoy mientras no hubo tiempo, cuando el tiempo llegue ya será mañana... y mañana la pausa habrá terminado, las dudas partido y el viaje concluido.